El windsurfing en La Guajira se ha convertido en el imán para los amantes de la adrenalina, posicionando la región como un destino clave para el turismo de aventura. Le contamos en qué consiste este deporte y todo lo que debe saber para ir a practicarlo.
El windsurfing es un deporte acuático que combina aspectos del surf y la vela. Consiste en deslizarse sobre el agua utilizando una tabla similar a la de surf, pero equipada con una vela montada en un mástil libre que permite al deportista controlar la dirección y la velocidad con la fuerza del viento. El windsurfista se coloca de pie sobre la tabla y utiliza la vela para captar el viento y moverse, inclinando y girando la vela para cambiar de dirección y mantener el equilibrio. El deporte se puede practicar en distintas condiciones de agua, desde lagos tranquilos hasta océanos con olas, lo que lo hace versátil y accesible para personas de diferentes niveles de habilidad. Existen diversas modalidades, como el freestyle, donde se realizan maniobras y saltos acrobáticos; el slalom, enfocado en la velocidad y maniobras rápidas entre boyas; y el wave, que combina el windsurf con el surf en olas grandes.
El mercado del windsurfing ha mostrado un crecimiento constante. Según un informe de la International Windsurfing Association publicado el 15 de diciembre de 2023, el número de practicantes de windsurfing a nivel mundial ha aumentado con el tiempo en los últimos cinco años en un 10%, y los turistas que practican windsurfing tienden a gastar más en sus viajes en comparación con los turistas de playa tradicionales, con una diferencia del 30% más en alojamiento, comidas y actividades.
De acuerdo con Nicolás Rico, instructor de la escuela de windsurfing Kite & Surf School, y quien lidera los estudios que ha realizado la Secretaria de Turismo de La Guajira sobre el windsurfing, desde 2020, hasta el 20 de junio de 2024, el número de turistas interesados en windsurfing ha aumentado en un 40% en Colombia. Este crecimiento se refleja en la ocupación hotelera en áreas clave como Cabo de la Vela, que ha experimentado un incremento del 25% durante la temporada alta de windsurfing, que es de noviembre a abril de cada año. El aumento del turismo ha contribuido a la creación de más de 150 empleos locales en sectores relacionados con el deporte, desde instructores hasta personal en restaurantes y hoteles, según la Secretaria de Turismo de La Guajira.
Según Rico, La Guajira es uno de los lugares del mundo que cuenta con condiciones óptimas para el desarrollo de este deporte por cinco razones: “Sus vientos constantes, especialmente en lugares como Cabo de la Vela y Punta Gallinas. Estos vientos proporcionan condiciones ideales para el windsurfing durante gran parte del año. Segundo, las aguas en La Guajira, como en Cabo de la Vela, son relativamente tranquilas y claras, lo que facilita la navegación y permite a los windsurfistas disfrutar de una experiencia fluida y segura. Tercero, el clima cálido de La Guajira asegura que el deporte se pueda practicar durante todo el año, ofreciendo a los turistas una opción atractiva sin importar la estación. Cuarto, la combinación de desiertos, dunas y mar crea un entorno visualmente impresionante para los deportistas y ofrece una experiencia de windsurfing en un paisaje natural espectacular. Por último, la presencia de escuelas de windsurfing y centros de alquiler en la región proporciona a los visitantes el equipo y la formación necesarios para disfrutar del deporte, adaptando sus servicios a las condiciones locales”, explicó.
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Uno de los estudiantes extranjeros de Nicolás Rico, en la escuela Kite & Surf School es Javier Moreno, quien llegó a La Guajira como turista desde España en 2015, y con el tiempo empezó a apasionarse por el windsurfing. “Nunca olvidaré mi primer viaje a La Guajira. El viento constante y las aguas cristalinas de Cabo de la Vela crearon el entorno perfecto para el windsurfing. Soy un amante del deporte y he practicado en varios lugares alrededor del mundo, pero La Guajira tiene algo realmente especial. La combinación de paisajes desérticos y mar azul es impresionante y única. La calidad de las escuelas locales, como la Kite & Windsurfing School, hizo que mi experiencia fuera aún mejor. Los instructores son extremadamente profesionales y conocedores del área. Además, el ambiente relajado y la calidez de la gente local hicieron que cada sesión en el agua fuera un placer. Sin duda, volveré, y recomiendo este destino a cualquiera que busque una experiencia de windsurfing excepcional”, contó Moreno.
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Para practicar windsurfing en La Guajira, los turistas deben cumplir con ciertos requisitos y seguir un proceso específico, según Moreno:
Asimismo se debe seguir el siguiente proceso:
El windsurfing, como cualquier deporte acuático, conlleva ciertos riesgos que los practicantes deben conocer y tomar en cuenta para garantizar su seguridad:
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