Nueve de cada diez colombianos quieren viajar por el mundo al tiempo que cuidan el planeta.
Si uno cierra los ojos y piensa en descansar, sin duda, la mente se pone azul. Un celeste extenso y sin final. Luego, aparece el amarillo. Del sol, la arena y un margarita granizado con sal, limón y tequila. Y en ese arcoíris de colores que se va formando surge también el verde, de las palmeras, los arbustos, las flores y… la sostenibilidad.(Lea también:¿Se le mide? Así es la travesía más difícil e inexplorada de Colombia)
Sí, los viajeros colombianos, cada vez más, cuando piensan en descanso incluyen entre sus ideas la importancia del cuidado del planeta. Porque descansar no es solo cerrar los ojos, disfrutar un coctel y sentir la brisa del mar, sino que es liberar la mente, dejarse llevar por un paisaje repleto de colores y no agobiarse por un mundo que, bajo la sombra de miles de problemas y una irrefutable crisis climática, parece cada día más gris. De hecho, según el Informe Sobre Turismo Sostenible 2023, que realiza Booking.com, nueve de cada 10 colombianos quieren viajar de manera sostenible este año.
Pero ¿a dónde? ¿Y, más importante aún, cómo? Un viaje de descanso debe ser eso: descanso. La tranquilidad de recostarse bajo la sombra de los árboles con un coctel helado, un plato de nachos para ‘picar’ y el sonido de los pájaros, el viento y las olas del mar como la música que ambienta.
Allí, la Riviera Maya surge como el escenario ideal. Un destino apenas a cuatro horas en avión, verde entre por sus manglares, celeste por su mar Caribe, blanco por sus extensas playas y repleto de diversión, tranquilidad y resorts. Un ‘todo incluido’ no es probablemente la primera idea que viene a la mente de quien quiere cuidar el ambiente, pero sí de aquel que quiere descansar.
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Conscientes de eso, Inclusive Collection, parte de World of Hyatt, ha centrado el foco en sus hoteles en eso: en que el descanso, además de ser azul y amarillo, también sea verde, muy verde.
Este medio pudo conocer de primera mano algunos de esos esfuerzos, pero también mucho del destino, y le traemos un recorrido ideal entre hoteles que combinan la tranquilidad y el descanso con acciones que cuidan el planeta, sin dejar de lado, por supuesto, las muchas actividades que tiene para ofrecer la estrella turística del Caribe mexicano: Cancún. Empecemos entonces este viaje que estará dividido por una oferta variada para todos.
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El descanso siempre es lo que más queremos. Por eso, los más grandes y los más pequeños encuentran en Cancún un sinfín de posibilidades, desde disfrutar de las cálidas aguas del mar Caribe o jugar entre los espacios deportivos hasta relajarse en un día completo de spa y golf. En ese caso, la recomendación es el hotel Dreams Jade Resort & Spa.
Ubicado en Puerto Morelos, a cuarenta minutos desde el aeropuerto de Cancún, el Dreams Jade está repleto de actividades que van desde salones de juegos para los más chicos hasta tres piscinas climatizadas (una exclusiva para adultos). Pero también se puede practicar excursiones en kayaks y catamaranes y recorrer las tranquilas aguas de un Caribe azulado y perfecto.
En el caso del Dreams Jade, el verde está en su Planta de Tratamiento de Aguas Residuales que hace que ni una sola gota de las aguas servidas del hotel contamine cenotes o llegue al mar, pues se reutilizan (después de tratadas) para regar los jardines. También hay verde en su protección y liberación de más de 410 neonatos de tortugas con un plan diseñado específicamente para la conservación de esta especie que llega a desovar en sus playas; y más aún por su proyecto para restaurar dunas, una barrera natural que usualmente es retirada de los resorts, pero que es clave para que exista playa (y aquí lo saben bien).
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Si usted quiere pasar todo el tiempo en el hotel, puede hacerlo, y disfrutar, además, de la insuperable gastronomía mexicana o arriesgarse con la comida del mundo en alguno de sus nueve restaurantes que ofertan comida francesa, mediterránea, italiana, internacional y, por supuesto, tradicional mexicana. Acá elbuen comer es la clave.
Además, puede salir a recorrer el pequeño mercado de Puerto Morelos, a escasos cinco minutos en carro, donde encontrará toda la identidad mexicana en un pequeño pueblito de pescadores cuya plaza central se repleta por las noches de viajeros que disfrutan de música en vivo y los pequeños restaurantes y ‘puesticos’ de artesanías para caminar.
Cuando la idea, en cambio, es una escapada en pareja, el Secrets Playa Mujeres Golf & Spa Resort es la opción idónea. Enclavado en la costa frente a Isla Mujeres, a unos 20 minutos del aeropuerto de Cancún, el Secrets es el lujo llevado a su máximo esplendor. Allí, la restauración de dunas es clave, en una zona estratégica a nivel geográfico, además, porque no se ve afectada por el usual sargazo (producto de la crisis climática global).
Allí, aunque hay zonas para familias, el ambiente es más romántico. En medio del mismo hotel hay áreas de conservación de especies y torres de avistamiento de aves (donde por las noches usted podrá realizar cenas con el amor de su vida). Su playa, quizá la mejor de las opciones listadas en este artículo, es extensa y tranquila, entre azules y verdes que transmiten calma.
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El Secrets es un lugar para quedarse y no salir. Sus villas inmensas con piscinas privadas, y sus restaurantes gourmet a la carta, sin tener que hacer reservas, además de sus decenas de actividades, invitan a descansar entre un sinfín de paz.
En este hotel, en específico, el verde está en sus cuantiosas inversiones de más de 2,1 millones de dólares en paneles solares. Así mismo, en el uso, similar al Dreams Jade, de sus aguas servidas después de tratadas para el riego, y su uso de más de 379.456 artículos rellenables, reutilizables o reciclables, que implican menos desperdicio en cosas tan simples como tomarse un cóctel.
Y para los jóvenes (o aventureros de cualquier edad) que buscan más fiesta que descanso, y que son usualmente muy exigentes con la sostenibilidad, la recomendación es el Breathless Cancún Soul Resort & Spa. Ubicado en plena zona hotelera de Cancún, alrededor de decenas de otros hoteles y resorts, dos imponentes y modernos edificios crean el escenario perfecto para el disfrute sin ningún tipo de arrepentimientos.
Allí, podrá encontrar de dos espacios: uno de energías tranquilas para relajarse y otro de energías altas para literalmente “rumbear” sin parar. Su ubicación, entre el Caribe y la laguna de Nichupté, deja disfrutar de las vistas ideales para una sesión de fotos para Instagram, y su cercanía a la zona más activa de la ciudad permite a los viajeros fácilmente salir y conocer de la cultura o bien de la vida nocturna que tiene para ofrecer Cancún.
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El Breathless Cancún es un edificio inteligente capaz de captar el agua de lluvia en sus pisos de terrazas para uso en riego y contra incendios; y aprovecha la temperatura corporal de sus huéspedes para a través de un sistema de chillers industriales reutilizarla en zonas donde se requiera calentar o generar energía.
En todo caso, sea cual sea la opción, el lujo y el descanso se pueden siempre combinar con la responsabilidad, que tenemos todos, de cuidar el planeta que tanto disfrutamos.
EDWIN CAICEDO | REDACTOR MEDIOAMBIENTE
*ENVIADO ESPECIAL DE EL TIEMPO.
* Invitación de Inclusive Collection, parte de World of Hyatt.