AVIONETA PRIVADA SE ESTRELLó CERCA DE WASHINGTON TRAS SER INTERCEPTADA POR CAZAS ESTADOUNIDENSES

Una pequeña aeronave particular se estrelló en el suroeste de Virginia, cerca de Washington DC, en un hecho que es investigado, luego de que se conociera que fue interceptada por cazas de Estados Unidos.

De acuerdo con el reporte oficial, se trata de una avioneta Cessna Citation que chocó en una “zona montañosa, escasamente poblada”, informó la Administración Federal de Aviación de Estados Unidos (FAA, por sus siglas en inglés).

El organismo oficial señaló que la aeronave tenía como destino el aeropuerto MacArthur en Long Island, en el estado de Nueva York, y había salido de Elizabethton, en el estado de Tennessee, al sur del país.

El accidente se presentó luego de que aviones de combate F-16 de las Fuerzas Armadas interceptaran la avioneta, después de que el piloto no respondiera a los llamados de las tripulaciones de los aviones militares. La avioneta llevaba cuatro pasajeros, según medios estadounidenses.

“Avioneta se estrella tras persecución de aviones de combate en el área de Washington. Las autoridades estadounidenses enviaron aviones de combate para perseguir a una avioneta que violó el espacio aéreo en el área de Washington DC y luego se estrelló contra un terreno”, señaló Tribuna Digital7, al publicar un video de la trayectoria de la aeronave.

Por su parte, el Comando de Defensa Aeroespacial de Norteamérica (NORAD, por sus siglas en inglés) informó en un comunicado que los F-16 emplearon bengalas para llamar la atención del piloto, sin que respondiera, hasta que su avión fue interceptado sobre las 3:20 p. m. del domingo (hora local).

“En coordinación con la Administración Federal de Aviación, aviones de combate F-16 de NORAD respondieron a un avión Cessna 560 Citation V”, que no contestaba a sus señales y que volaba sobre Washington y Virginia, según el reporte del organismo.

Igualmente, explicó que los F-16 volaron “a velocidades supersónicas”, por lo que es posible que los habitantes de la zona oyeran “un estallido sónico” y que se escuchó en varios sectores de Virginia.

“Sube el volumen: así suena un F-16 cuando rompe la barrera del sonido. El caza estadounidense debió despegar cuando una avioneta violó el espacio aéreo de Washington, hizo caso omiso a las advertencias, y terminó estrellándose en una zona montañosa en Virginia”, destacó DNewsOK en su cuenta de Twitter al publicar un video en el que se escucha el estruendo y la reacción de un perro que se encontraba acostado en una silla.

Los especialistas señalaron que el caza rompió la barrera del sonido sobre la bahía de Chesapeake, lo que provocó una fuerte “explosión” que sacudió las casas y sembró el pánico.

Las autoridades indicaron que después de intentar llamar la atención del piloto del Cessna con las bengalas, los aviones militares interceptaron el aparato.

“Durante este suceso, el avión del NORAD también utilizó bengalas, que pueden haber sido visibles para el público, en un intento de llamar la atención del piloto”, indicó la entidad.

Agregó que “las bengalas se emplean con la máxima consideración por la seguridad de la aeronave interceptada y de las personas en tierra. Las bengalas se queman rápida y completamente y no hay peligro para las personas en tierra cuando se dispensan”.

“El piloto no respondía y, en consecuencia, el Cessna se estrelló cerca del Bosque Nacional George Washington, en Virginia. NORAD trató de establecer contacto con el piloto hasta que el avión se estrelló”, indicó el organismo en comunicado de prensa.

El accidente

Sitios web y de redes sociales dedicados al rastreo de vuelos señalaron que la aeronave sufrió un rápido descenso en espiral, cayendo en un momento dado a una velocidad de más de 30.000 pies (9.000 metros) por minuto antes de estrellarse.

Fuentes militares aclararon que la persecución no provocó el accidente, por lo que se adelantan las investigaciones para tratar de determinar las causas del mismo.

Entre tanto, se indicó que la avioneta estaba registrada a nombre de Encore Motors of Melbourne Inc, una empresa con sede en Florida.

The New York Times informó que John Rumpel, de 75 años, quien dirige la compañía empresa, le manifestó a ese medio que su hija, una nieta de 2 años, su niñera y el piloto eran los que iban a bordo del vuelo, tras señalar que regresaban a East Hampton, Nueva York, luego de una visita de cuatro días a su casa en Carolina del Norte.

El empresario, quien también es piloto, señaló que por el momento tiene poca información sobre las causas del accidente, pero que esperaba que no hubieran sufrido, al señalar que si hubiera perdido la presurización, “todos se habrían dormido y nunca habrían despertado”.

Entre tanto, un funcionario de la Casa Blanca señaló en un comunicado que el presidente Joe Biden, que estuvo este domingo jugando al golf con su hermano cerca de la base conjunta Andrews, en las afueras de la capital, en Maryland, fue informado sobre este incidente y agregó que el sonido proveniente de los aviones se oyó débilmente en la zona donde estaba el mandatario.

El mandatario estaba jugando al golf con su hermano en la base militar de Maryland en el momento en que despegó el caza.

Anthony Guglielmi, portavoz del Servicio Secreto de Estados Unidos, dijo que el incidente no afectó las actividades del presidente estadounidense.

Este tipo de aviones son jets de negocios, con una capacidad de hasta 12 pasajeros, según la página web de la compañía.

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